El reemplazo de Tyron Woodley en el combate contra Jake Paul trajo consigo muchas polémicas. En un principio, se suponía que Paul se enfrentaría a Tommy Fury el próximo 18 de diciembre. Sin embargo, luego se conoció la noticia de que se retiraba de la pelea por una condición médica. De este modo, el expeleador de UFC tendrá su tan aclamada revancha.
La noticia fue publicada a través de las redes sociales de Paul. Ambos peleadores quedaron bajo los reflectores y micrófonos de los medios de comunicación. Debido al último encuentro que tuvieron, todos los periodistas se encuentran atentos a sus palabras y acciones. Por lo que durante una entrevista virtual, Woodley tuvo un enfrentamiento con un reportero.
El conflicto se desencadenó luego de que al peleador estadounidense se le preguntara por Dan Hardy. A lo que comentó: “Estamos hablando de Tyron Woodley y Jake Paul, la pelea más grande del año. Así que, respetémonos a mí mismo y respetemos a Jake Paul, porque somos nosotros los que ponemos traseros en los asientos. Dan Hardy no ha tocado una cara en 10 años“.
A partir de ese momento se notó un ambiente de hostilidad por parte del excampeón. Quedando en evidencia cuando se hizo mención del tatuaje que se tuvo que realizar para cumplir con la apuesta. Claramente aún le sigue dando un mal sabor de boca, ya que es un cruel recordatorio de su derrota anterior.
De este modo, cuando se le pidió que mostrara la tinta de “Amo a Jake Paul”, Woodley dijo rotundamente: “No, no puedo. Sin embargo, te mostraré el otro extremo”. Continuando a apagar la cámara. Quedó demostrado que el tatuaje representa una fibra sensible que está dispuesto a superar en su próximo combate. En el cual la apuesta está firmada por contrato, y es de $500,000 si puede noquear a Paul.