El décimo del ranking de la división de peso ligero, Gregor Gillespie, se cansó de pedir una pelea con Tony Ferguson durante el último tiempo. Es tan así la situación que, en su más reciente entrevista, “The Gift” calificó de “frustrante” el hecho de los constantes llamados que realiza hacia su rival sin una respuesta concreta por la realización de un futuro enfrentamiento y explicó que no entiende los motivos de los rechazos.
A sus 35 años, el peleador oriundo de Rochester sabe que su carrera en las Artes Marciales Mixtas (MMA) no va a seguir en su máximo nivel durante mucho tiempo, y por eso se preocupa por sus futuros desafíos. De esta manera, en diálogo con MMA Junkie, el luchador se expresó sobre la situación y comentó su frustración por lo sucedido.
“He estado en silencio por radio los últimos cinco o seis años. No llamo a la gente. He sido bastante inflexible en no hacer eso. Me han ofrecido peleas. Son solo peleas que no me interesa tomar. De ninguna manera soy antiguo, tengo 35 años. No me quedan tantos años en mi carrera para que simplemente esté luchando contra chicos clasificados por debajo de mí“, detalló el luchador sobre su carrera.
En ese sentido, Gillespie contó que “después de vencer a Ferreira, me ofrecieron Ferguson por la tarjeta de noviembre y dije que sí. No recibí respuesta. Me puse en contacto con mi gerente. Él dice: ‘No suenan demasiado emocionados para luchar contra ti’. Seguimos pidiendo la pelea, y la misma respuesta: ‘No parece emocionado, no quiere la pelea, bla, bla, bla’ Luego lo veo llamando Michael Chandler. Eso realmente me enojó”.
Sobre el final, “The Gift” aseguró no entender los motivos de los constantes rechazos. “No estoy muy seguro de cuál es el problema, por qué Tony no querría luchar contra mí. Tengo 14-1 de récord, tengo 12 finalizaciones, solo tengo una pelea en UFC que no fue un final. Probablemente podrías esperar que con una pelea como Tony y yo obtendríamos 50.000 dólares adicionales. Debería ser una especie de pelea de fuegos artificiales. Realmente no veo cuál es el inconveniente de luchar contra mí. Es muy, muy frustrante“, cerró el luchador.
