BUENOS AIRES-. Argentina, 1985 puede haber perdido el Oscar a Mejor Película Extranjera contra la alemana Sin Novedad en el Frente, pero no hay duda de que ha recorrido un enorme camino desde su estreno. Aunque no logró darle a la nación su merecida tercera estatuilla dorada, el público estará por siempre agradecido con Santiago Mitre (director del filme) por haber llevado una historia tan importante a la pantalla grande (y al mundo).
Durante la noche del domingo 12 de marzo América Latina se reunió frente al televisor a la espera de una sola categoría: Mejor Película Extranjera. Todo era mística e ilusión, hasta Antonio Banderas había practicado cómo pronunciar “Argentina”. Sin embargo, cuando él y Salma Hayek abrieron el sobre, claro era el gesto de desilusión en sus caras al leer: “All Quiet on the Western Front”.
Aunque no era el resultado que esperaban, Santiago Mitre, Ricardo Darín, Peter Lanzani y el resto del equipo de Argentina, 1985 le dieron cierre a este ciclo con un exclusivo after party en el restaurante Tatel, propiedad del tenista español Rafael Nadal, localizado en Beverly Hills. La celebración, organizada por Amazon Studios, comenzó a las 20 hs tras concluir la ceremonia de los Oscar.
Argentina, 1985 se llevó el Globo de Oro a mejor película de habla no inglesa
El after party de Argentina, 1985 fue uno de los más concurridos de la noche, y en homenaje al galardonado filme, el menú de tragos contó con nombres alusivos como “1985”, “Darín”, “Lanzani” y “Oscar”. En tanto, en sus historias de Instagram Santiago Mitre sorprendió con una divertida imagen: acompañado de su pareja Dolores Fonzi y del productor Axel Kuschevatzky, el trío posó con la L de “looser” en la frente.
En su cuenta de Twitter, uno de los productores de Argentina, 1985, Axel Kuschevatzky, agradeció al público por su apoyo: “Gracias por tanto amor, tanta pasión y por dejarnos contar una historia tan maravillosa, relevante y por sobre todas las cosas, nuestra. El de Argentina, 1985 es un viaje alucinante y una forma de buscar construir una memoria colectiva. Este agradecimiento es infinito”.