PARANÁ.- Se realizó en los últimos días inspecciones en el estadio Presbítero Bartolomé Grella, que en horas del mediodía del miércoles decretaron que Patronato no podrá utilizarse en la Copa Libertadores. Por lo menos, será de ese modo por la primera fecha. En el caso de los otros dos partidos de local, podría cambiar su suerte si la dirigencia realiza los acomodos necesarios.
Tras la inspección que realizó Conmebol, se explicitó que “el club ha recibido una notificación sobre el césped del estadio Presbítero Bartolomé Grella, en la cual se informa que no reúne, en este momento, las condiciones para disputar un partido de la Copa Libertadores 2023”. De esa forma, quedó descartada que el encuentro se lleve a cabo en Paraná.
De todas formas, se realizarán nuevas pruebas sobre el campo de juego para tratar de conseguir el aval del ente. Asimismo, desde el ente regulador del fútbol sudamericano se seguirá evaluando la evolución del campo de juego para poder recibir, a través de una nueva resolución técnica, un resultado favorable”. De esa forma, se esperan pruebas para más adelante.
Asimismo, el Rojinegro aseguró en el comunicado que continuará con las obras que lleva adelante para poder conseguir el visto bueno de la dirigencia. En ese sentido, ya hubo algunos arreglos en las tribunas y la incorporación de butacas para poder jugar el torneo. Por último, también se esperan remodelaciones en cuanto a la iluminaria.
La cancha de Patronato, inundada
En horas de la siesta del miércoles, a pocas horas de la notificación del organismo de fútbol, se pudieron difundir imágenes que muestran el estado de la cancha. Lluvias de más de 100 milímetros cayeron sobre la capital entrerriana hicieron que la cancha no drenara a la perfección. Como resultado, el banco de suplentes se vio repleto de agua.
