SALTA – El caso sucedió el jueves pasado, cuando Lidia Cardozo, madre de Leonel Francia, del barrio Solidaridad, llegó hasta el hospital Papa Francisco, en el sudeste de la ciudad. El niño llegó ya sin signos vitales, los médicos intentaron reanimarlo, pero de nada sirvió, pues las lesiones que había sufrido en una supuesta caída de un segundo piso de su casa, en el barrio Solidaridad.
La versión del accidente no se sostuvo por mucho tiempo, púes los peritos forenses descubrieron lesiones no compatibles con una caída, sino más bien como resultado de golpes y maltrato infantil, pistas que llevaron a que el pasado, el fiscal penal Leandro Flores, de la Unidad de Grave Atentados contra las Personas, pidiera la detención de la madre del niño.
Ese mismo día, Cardozo fue imputada provisionalmente por el delito de homicidio agravado por el vínculo, mientras se sigue adelante con otras diligencias dirigidas al esclarecimiento total del hecho, lo que también exigen los vecinos y familiares del menor.
Leonel Guillermo Francia asistía a la academia premilitar General José de San Martín, de esta ciudad, hecho que llevó a los integrantes de la misma a realizar el sábado pasado un emotivo homenaje en la plaza principal de la ciudad, lo que sensibilizó aún más a los salteños, quienes reclaman justicia por Leonel.
El pequeño vivía con Cardozo, de 41 años, en una casa de tres plantas en el barrio Solidaridad. Según lo trascendido, el cadáver del menor presentaba lesiones muy graves, entre ellas excoriaciones en las piernas y los brazos, lesiones en el pie, sangrado de oído y una herida profunda en el mentón.
La madre insistió en que su hijo se había caído desde el segundo piso, con lo cual intentó justificar las heridas que presentaba el menor con ese golpe. Sostuvo que no vio la caída, que fue el niño el que le comentó sobre el golpe sufrido y por eso no quería ir al colegio.
Indicó que sólo alcanzó a verle una lesión en el ojo derecho y que, más tarde, al despertarlo, el pequeño ya no reaccionaba, por lo que decidió llevarlo hasta el hospital, donde su relato perdió consistencia, cuando los médicos comenzaron a ver que las heridas que presentaba no encajaba con una caída.
Con el correr de los días, las marchas por justicias sacaron a luz un aspecto que no es nuevo en materia de violencia intrafamiliar. Al parecer, la acusada ya habría sido denunciada por someter a su hijo a golpizas. Los vecinos contaron que “se sentía cómo lloraba el menor”. En distintos portales informativos, surgieron otros detalles del maltrato.
Completar la carpeta
Una vecina, madre de una compañerita de la escuela de Leonel, contó que el niño solía refugiarse en su casa, donde se quedaba hasta tarde. Confirmó que la madre ya había sido denunciada, pero que la justicia ni la policía hacían nada al respecto.
Dijo que el principal temor exteriorizado por el pequeño giraba en torno a los deberes de la escuela, pues su madre lo amenazaba constantemente con golpearlo sino tenía la carpeta completa, razón por la cual iba a su casa a fin de trabajar con su hija en esas tareas.
Incluso afirmó que la madre del menor, ahora detenida, sabía que iba a su casa para completar la carpeta. “Se quedaba hasta tarde”, aseguró la vecina, quien cree que lo hacía simplemente para evitar estar en su casa y, con ello, evadir los golpes que le daba su madre.
Reconoció que, al verlo con lesiones, los vecinos solían preguntarle qué le había sucedido, pero que el niño solo bajaba la cabeza y decía: “me golpeé”, sin aducir más detalles respecto a cómo se produjeron esas lesiones, de las cuales, por los dichos de los vecinos, la justicia ya estaba al tanto.
Cabe recordar que este hecho no es el primero, ya que meses antes, otra mujer fue detenida por la muerte de su hija de dos años, quien habría fallecido por asfixia mecánica en la ciudad de Orán luego de haber quedado atrapada entre unos barrotes.
El hecho ocurrió el 10 de marzo, cerca de las 15, aunque la denuncia a la policía recién se realizó al día siguiente, cuando la madre de la víctima arribó a su casa, ubicada sobre las calles Mario Silva y 9 de Julio, y encontró muerta a su hija.
La mujer dio aviso al 911 y declaró que se había ausentado de la vivienda el viernes a las 11 y que cuando regresó, el sábado, descubrió el cuerpo sin vida de la pequeña. La autopsia confirmó el causal de muerte y la fiscal a cargo del caso, Claudia Carreras, dispuso las medidas correspondientes para conocer en qué circunstancias murió la niña. Carreras fue quien dispuso la detención de la madre por abandonar a su hija, para luego poder imputarla formalmente.