Los Lakers han asegurado las bases de su proyecto a mediano plazo con las renovaciones de LeBron James y Anthony Davis. Las extensiones de contrato de la dupla estelar de la franquicia púrpura y oro dieron un gran alivio a sus fanáticos, pero a la vez se dio por cerrada una posibilidad que hacía soñar a muchos seguidores de la NBA: el Big 3 con Giannis Antetokounmpo.
Durante semanas, se especuló que Anthony Davis renovaría solo por una temporada (más la opción del jugador), y que LeBron James negociaría su extensión al finalizar su vínculo. Es decir, que ambos discutirían sus contratos al finalizar la campaña 2020-2021. Esto con la finalidad de ir por Antetokounmpo en la próxima Agencia Libre, y poder reestructurar la nómina salarial.
Los Lakers colman el espacio salarial
No obstante, horas atrás se confirmó que James se lleva el contrato máximo de la franquicia por 85 millones de dólares, en un vínculo que se alarga hasta 2023. Además, el equipo se ha comprometido con ‘AD’ por 5 temporadas a cambio de 190 millones de dólares. Esto deja a los Lakers con un margen salarial muy bajo, por lo que se ha dado por hecho que la movida ha sido un portazo al ‘Greek Freak’.
La única forma posible de que Antetokounmpo arribe a los Lakers sería que renuncie a la idea de un máximo salarial, y se resigne a un sueldo significativamente inferior al de un jugador de su calibre. El 4 veces All-Star y doble MVP de la NBA debe sacrificar su sueldo a cambio de la posibilidad de armar uno de los mejores equipos de la historia y competir por muchos títulos.
Miami Heat
Otro de los equipos que sonó fuertemente para llevarse a Giannis semanas atrás fue Miami Heat. Sin embargo, los campeones de la Conferencia Este también comprometieron gran parte de su margen salarial con la renovación del contrato de Bam Adebayo. Parece una magnífica situación para Milwaukee Bucks en su intento de retener al jugador estrella.

