SANTA FE.- Tal como dice su seudónimo, el Cementerio de Elefantes vuelve a ser uno de los estadios más difíciles de visitar en el fútbol argentino. Luego del mal arraque de temporada, la llegada de Néstor Gorosito a Colón le permitió abandonar los últimos puestos de la Liga Profesional. Ayer se impuso 2-0 contra Banfield por la fecha 15.
En el primer tanto, el reloj marcaba apenas dos minutos cuando el Sabalero orquestó una gran ofensiva que dejó al lateral devenido en mediocampista frente al arco. Más de un año después de su última conquista, consiguió el 1-0 con un disparo fuerte y a media altura. Nada para hacer para el Taladro, que sigue sin levantar.
Y por si faltaba algo, también logró pegar en el cierre de la primera mitad. Ramón “Wanchope” Ábila recibió en la puerta del área y ensayó una media vuelta que tenía como destino vencer a Facundo Cambeses. Sin embargo, rebotó en un defensor. La sorpresa la dio Cristian Vega, que sacó un tiro rasante desde afuera del área y marcó el 2-0 definitivo.
De esta forma, llegó a seis partidos sin perder en condición de local el elenco de Pipo. Todo lo contrario es para los de Javier Sanguinetti -también pasa por la cuerda floja-, que dejaron atrás una racha de tres partidos sin caídas. Ahora, en el campeonato, Colón figura décimo séptimo con 17 unidades y el elenco del sur del Gran Buenos Aires vigésimo tercero con 15.
La otra gran noticia para Colón
Uno de los jugadores a recuperar de cara al segundo semestre del año es Facundo Farías, quien había sufrido la ruptura parcial del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha en julio del año pasado. Eso derivó en varios meses fuera de las canchas. Pero ahora el entrenador definió que podría sumar minutos en la Reserva contra Instituto.
