SALTA.- Desde hoy hasta el domingo 20 de marzo, se celebra la Semana Mundial de Concientización sobre el Consumo de Sal, que tiene como objetivo lograr llamar la atención a los ciudadanos sobre la importancia de reducir el consumo diario de sal agregada en los alimentos. Por lo que desde el Ministerio de Salud de Salta organizan jornadas educativas que están dirigida a todos aquellos que elaboran alimentos, ya sea para la venta o el consumo en el hogar.
A pesar de que la sal es una parte esencial de la dieta, la mayoría de las personas consume más de lo que está considerado como saludable. Este condimento contribuye a elevar la presión arterial, que es uno de los factores de riesgo de enfermedades cardiovasculares y renales, obesidad, osteoporosis y enfermedad de Alzheimer. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 30% de la población mundial mayor de 18 años es hipertensa, y cerca del 50% de ellos no recibe tratamiento.
En este contexto, la Subsecretaría de Medicina Social brindó hoy la primera charla educativa con consejos para disminuir el consumo de sal, en el Centro de Salud N°28 en Villa Asunción, en la provincia de Salta. Además, les tomaron la presión arterial a todos los concurrentes para verificar su estado de salud.
Estas jornadas continuarán mañana martes 15 de marzo, de 10 a 12 horas, en el Centro de Salud N°61 de Barrio Solidaridad, y finalizarán el miércoles 16, también de 10 a 12, en el Barrio Roberto Romero, Centro de Salud N°47. También habrá actividades sobre alimentación saludable en los centros de primer nivel de atención y hospitales públicos de toda la provincia.
Consumo por día y alternativas
Lo recomendable es que los adultos consuman menos de 5 gramos de sal por día, pero en Argentina, el consumo promedio es de 12 gramos. El exceso de este condimento se encuentra en su mayoría en los alimentos procesados, por lo que ya existe la ley 26.905 en el país, que busca promover la reducción del consumo de sodio, con acuerdos con la industria de los alimentos para su reducción progresiva.
Desde la OMS afirman que con el tiempo las personas pueden cambiar su gusto por la sal, ya que, si se disminuye gradualmente, querrán consumirla menos. Como alternativa a este condimento, las personas pueden usar otros ingredientes naturales que aportan sabor, por ejemplo: orégano, apio, laurel, perejil, albahaca, romero, jengibre, ají molido, pimentón, etc.