SALTA.- El exgerente del Hospital Juan Domingo Perón de Tartagal, Santiago Payo, se refirió a su salida y apuntó contra el Ministerio de Salud. A través de un video en Facebook, se despidió de los trabajadores del nosocomio y denunció la falta de respuestas de la cartera sanitaria. En esta línea, aclaró que desde que asumió siempre reclamó sobre los faltantes.
“Quiero agradecerle a todo el personal de este hospital, a todos los que me acompañaron. Cuando llegué hace 35 años encontré un hospital con muchísimas falencias edilicias, de personal. En aquel momento también emprendí la lucha en busca de soluciones y exigir a las autoridades provinciales que construyeran algo nuevo”, expresó Santiago Payo.
En el video, informó que según un informe de la Auditoría General de la Provincia (AGAP), había un faltante de 87 millones de pesos y una deuda de 23 millones de pesos. En esa deuda, se incluía la falta de pago a profesionales, a la Dirección General de Rentas y a ciudadanos de Tartagal. En relación a los últimos, resaltó que siempre accedieron a otorgar las prestaciones a la institución.
“Esas dudas se fueron cubriendo con 10 millones de pesos primero y 3 millones 400 mil pesos después”, detalló, con fondos que otorgó el Ministerio. Por otro lado, el gerente recordó que al asumir contaba con un servicio de cirugía suspendido al menos cinco meses antes. Por este motivo, se convocó a un profesional médico jubilado para cubrir las necesidades urgentes.
Luego, remarcó que los faltantes de personal, en todos los sectores del nosocomio, se convertían en un problema para la atención. Se trató puntapié para sumar a personas con contratos internos del hospital. “Tuvimos que pagar cuentas o facturas firmadas por quienes no correspondía en la gerencia anterior”, reprochó Santiago Payo.
Falencias
En otro tramo de su declaración, el exgerente señaló el déficit en la parte administrativa, con una sola persona a cargo de las compras. “Esa persona no podía sumar más horas por agotamiento y el trabajo ya se tornaba insalubre”, sentenció. El nosocomio tiene faltantes en los distintos servicios que deben dar respuesta a una población de 200 mil habitantes.
Por último, Santiago Payo afirmó que solo son 53 los agentes sanitarios cuando deberían ser mínimo 80. “Quiero decir que no estoy con el barbijo puesto porque quería mostrar que tengo la cara muy limpia y puedo dar la cara en cualquier lugar”, concluyó. Según dio a entender, su renuncia tiene que ver con las críticas que siempre elevó ante la falta de respuestas del ministro Juan José Esteban.
