RÍO DE JANEIRO (Brasil).- En el Jeunesse Arena de Río de Janeiro, Brasil, Terrance McKinney hará su primera aparición del año en UFC contra Ismael Bonfim. Cerca de enfrentar a un peleador que cuenta con la ventaja de la localía, el estadounidense asume el reto. En una entrevista reciente, McKinney se proyectó un grato desenlace.
“Estaba contento con eso, porque en el papel parece que va a ser un combate cerrado. Me gusta eso, así que cuando domine, no hay más remedio que darme un oponente clasificado después de esto. Alguien entre los 15 primeros“, comenzó expresando “T.Wrecks” sobre su próximo enfrentamiento en su aparición en el programa The MMA Hour.
Con dos sumisiones y un nocaut en sus tres victorias dentro de UFC, McKinney puntualizó en las actuaciones de su rival, quien lleva tres victorias por decisión en sus últimos duelos. “He visto sus vídeos, creo que es una máquina de decisiones, pero le gusta caer. Creo que eso va a jugar a mi favor”, sostuvo entonces el estadounidense.
Por otro lado, el peleador enfatizó en el momento actual que vive dentro de la promotora. “La presión se convierte en diamantes y estoy a punto de brillar. Quiero que la gente sepa lo que merezco y quiero estar entre los 10 primeros al final del año. Así que tengo que mostrar a todos estos chicos que están por delante de mí que no tienen un número son solo una pérdida de tiempo”, comentó.
Para este compromiso, el luchador enfrentará a un contrincante que aún no debutó en UFC, pero tuvo un gran paso previo por LFA y otras compañías. “Tengo que salir y sacarlo de allí en la primera ronda. Esto es para lo que vivimos, y hará que la victoria sea mucho más dulce cuando silenciamos a esa multitud“, concluyó Terrance McKinney.