RÍO DE JANEIRO (Brasil).- El 2022 resultó provechoso finalmente para Gregory Rodrigues, que tras su primera derrota en UFC obtuvo dos triunfos al hilo. Así pactó un compromiso para el evento 283 contra Brad Tavares, quien se retiró luego de la tarjeta por razones aún no reveladas. Con Brunno Ferreira como nuevo oponente, Rodrigues explicó cómo mantiene su enfoque.
Pese al tropiezo con el que el brasilero inició la temporada del año anterior, sus constantes triunfos -tres por nocaut técnico- le aseguraron un lugar en Río de Janeiro. La decepción se apoderó del luchador cuando Tavares abandonó la cartelera, pero Ferreira apareció para salvar el enfrentamiento. En la rueda de prensa previa al evento, Rodrigues se refirió a su anterior oponente.
“Creo que UFC y yo estamos en la misma página. Por eso después de esta pelea no creo que Brad Tavares sea el siguiente. Estoy mirando hacia arriba. Mi objetivo es entre los 15 mejores primero y ver a quién me van a poner. Creo que me van a ofrecer algo especial”, sostuvo el competidor, que peleará esta noche en su ciudad natal frente a un debutante en UFC.
Cuando el campamento previo estaba casi finalizando y los últimos preparativos empezaban a aflorar, Tavares se retiró de la tarjeta, el pasado 11 de enero. De ese modo, con un rival de poca antelación, los peleadores analizan otras estrategias. Pero desde su lugar, “Robocop” aseguró que no cambió su plan, a pesar de enfrentar a un rival distinto.
“No ha cambiado. Para mí, es un tipo bajo, fuerte, pero no cambié mi plan. Siempre pienso en los 15 minutos, como cinco minutos cada ronda. Sucedió antes, y fue una ventaja, así que sí, estoy listo para luchar. Estoy listo para hacer de todo: levantarme, ponerme de pie, dondequiera que vaya la lucha, estoy listo para ello”, concluyó Rodrigues.
