BUENOS AIRES-. Tras la entrada de Valentina a la casa de Gran Hermano, Marcos quedó más sensibilizado que nunca. Antes de su eliminación, Lucila y el salteño tuvieron una profunda y emocionante conversación en la que se pudo conocer un poco más del pasado del primo. Sin embargo, sus declaraciones alertaron a los televidentes.
“Tenía mucha cosas, varias cosas que me fueron influyendo y que estuve mal. No era anorexia. No podía digerir las comida, por nervios y por un montón de cosas. Fueron varios años complicados”, le dijo Marcos a la Tora antes de comenzar a llorar. “Vos no te das una idea pero vos salís primero de placa porque la gente te ama. Vos sos esta persona hermosa, con tanto amor y cero odio por todo esto que pasaste”, lo consoló Lucila.
El jueves por la noche, durante una charla con Gran Hermano en el confesionario, Marcos volvió a romper en llanto al recordar la dura infancia que tuvieron él y su hermana Valentina. “Viví cosas muy lindas, creo que también haberlo vivido con mi hermana es algo que no lo cambiaría por nada y nada de eso hubiera sido posible si la gente no me hubiese apoyado”, comenzó el salteño.
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“¿Qué es lo que te emociona tanto?”, le preguntó Gran Hermano al verlo sensibilizado, a lo que Marcos respondió entre lágrimas: “Me emociono porque mi hermana y yo vivimos cosas fuertes de chicos y siento que ella en algún sentido también necesitaba vivir esto conmigo. Me pone muy feliz que por lo menos haya sido acá y conmigo”.
“Mi hermana se fue, mi hermano también y sentíamos que no podíamos llegar del todo a la otra persona. Después pasó el tiempo, tuvimos charlas y cada uno contaba lo que había pasado. Y te pones a pensar como no estuve más tiempo o pude hacer más para que esté mejor y que no hayan pasado las cosas que tuvo que pasar. Yo me sentía mal y pensaba que del otro lado estaban bien, no sabía que ellos también estaban sufriendo”, recordó Marcos.