SANTA FE.- No es muy común, pero puede llegar a originarse. Los accidentes de auto en las competencias más destacadas de Argentina siempre dan que hablar. En este caso, la nueva fecha del TC 2000 vivió un momento estremecedor al ver volcar en reiteradas ocasiones el Honda de Javier Scuncio Moro, que quedó totalmente destruido.
Se trataba de la primera final de la mañana del domingo, donde a medida que pasaban las vueltas, más friccionada se vivía desde dentro de los vehículos. Finalmente, un despiste del corredor bahiense terminó preocupándolos a todos. Dio ocho vuelcos en el aire y finalmente atravesó la valla de contención de neumáticos de la ciudad de Rosario.
Es una de las curvas más rápidas del trazado, pero desde el corredor bonaerense minimizó la situación: “Sí, me imagino que de afuera se vio fuerte, pero desde adentro no fue tanto. Justo estaba disminuyendo la velocidad y es lo importante, al momento de frena que sea lo más lento posible. En la curva dos, toco el piano y el auto se pone de cola y ahí no lo pude traer y cuando tocó la leca empezó a dar vueltas“.
Por otro lado, dejó en claro que no tuvo ninguna secuela a partir del choque. Además, anticipó que lamentó no haber estado en la segunda final: “Sí, afortunadamente yo estoy bien, no me pasó nada, la seguridad del auto funcionó impecable. Agradecerle mucho a ellos. La verdad yo estoy impecable, si el auto estuviera estaría en la final”.
La salud de Leonel Pernía, la otra preocupación del TC 2000
Nada más y nada menos que el puntero del campeonato no pudo presentarse a correr por presentar problemas cardíacos: “Tuve un dolor en el pecho, pero no fue un infarto ni me sacó el aire, Por momentos, la puntada era más aguda”. Fue derivado a una clínica privada para constatar que todo está bien. Se esperan mayores novedades en la semana.