LAS VEGAS (Estados Unidos).- Quizá no tuvo la actuación más destacada de su carrera el último sábado, pero Alexa Grasso retuvo el cinturón de todos modos. Sin superar ampliamente a Valentina Shevchenko, la mexicana hizo lo necesario para mantener su posición. Respecto a una posible revancha, Grasso señaló que depende de la promotora y aseguró que ganó en el octágono.
“Estoy contenta con mi actuación”, remarcó la campeona en la conferencia de prensa posterior al evento. “Para mí, fue 3-2. El cuarto y el quinto eran para mí, pero no soy el juez, así que sí. Yo no soy el juez”, sostuvo entonces. En las tarjetas, ambas obtuvieron un 48-47 de dos jueces distintos, mientras que el tercero marcó un empate 47-47 determinando el resultado final.
En su anterior enfrentamiento, Grasso estaba cerca de la derrota cuando, ejecutando a la perfección la estrategia planeada con anterioridad, logró someter a Shevchenko. Pese a que la peleadora rusa modificó su plan acorde a lo demostrado en el primer duelo, no pudo superar a su rival en esta ocasión. Por eso, los medios consultaron a la actual campeona por una futura revancha.
“Es una pregunta interesante”, señaló en primer lugar la mexicana. “No me gustaría detener a la división. Hay muchas chicas que se pelean mucho para tener esta oportunidad como lo hice yo, así que no me gustaría detenerlas. Pero diga lo que diga UFC, me anoto”, indicó la peleadora a los periodistas presentes, quitando las ilusiones sobre una trilogía.
Con sus dos caídas por el título, Shevchenko deberá rearmarse con victorias para obtener una nueva oportunidad. La peleadora rusa llegó a ser una campeona superlativamente dominante, con seis defensas exitosas de cinturón. Pero su reinado concluyó con la asunción de Alexa Grasso, quien ahora deberá prepararse para su próxima retadora.
