Roxanne Modafferi, también conocida como “The Happy Warrior”, compitió 44 veces durante una carrera de 18 años que comenzó en la era de la infancia de las MMA. El MMA femenino existía sólo en los márgenes cuando se abrochó los guantes de cuatro onzas por primera vez en 2003, pero Modafferi estaba decidida a hacer una carrera con su amor por las artes marciales y terminó luchando bajo prácticamente todas las banderas de renombre para las mujeres.
Por desgracia, esa carrera pionera está a punto de llegar a su fin. A los 39 años, Modafferi anunció recientemente que su pelea del 12 de febrero en UFC 271 será la última. Y a pesar de que tuvo muchos altibajos, Modafferi se va con solo un verdadero arrepentimiento por su tiempo en el deporte, un arrepentimiento que se remonta a 2012, cuando se enfrentó a un competidor rival y ex compañero de entrenamiento, Takayo Hashi en un show de Jewels 18th Ring en Japón. Modafferi finalmente perdió por decisión unánime en el evento coestelar de la noche.
“Antes del combate que mencioné contra Hashi, me lastimé la rodilla”, reveló Modafferi recientemente en The MMA Hour , “y ese mismo día, recibí la oferta de pelea para pelear con ella. Y tenía tantas ganas de esa oferta de pelea, así que dije que sí, pensando que mi rodilla se curaría”, comentó. Sin embargo, no sucedió así. “Estuve, como, montando la bicicleta durante un mes como mi campamento de lucha. Y luego entré y tuve una pelea horrible, y tuve miedo de pisar con mi rodilla. Así que me arrepiento de haber peleado. Ojalá hubiera … tenía miedo de no tener nunca otra oportunidad de pelear con ella, así que ese es el único arrepentimiento que tenía. Fui estúpida. No debería haber tomado esa pelea. Pero aparte de eso, creo que realmente no me arrepiento de nada”.
Desde el momento en que comenzó, el objetivo principal de Modafferi fue pelear algún día en UFC. Es un objetivo que fue compartido por muchos de sus compañeros de su época y pareció ser imposible durante gran parte de su carrera, sin embargo Modafferi fue en última instancia una de las pocas pioneras del MMA femenino que se mantuvo el tiempo suficiente para verlo hecho realidad.
Su combate contra O’Neill será su 12a aparición dentro del octágono, y Modafferi incluso tuvo la oportunidad de competir por el título inaugural de peso mosca femenino de UFC en 2017. O’Neill ha ganado sus ocho combates profesionales de MMA, que incluyen tres finales consecutivas entre Antonina Shevchenko , Lara Procopio y Shana Dobson para dar inicio a su carrera en UFC.
