NEVADA (Estados Unidos).- Uno de los momentos más emocionantes de la noche de ayer en UFC 273 ocurrió cuando Khamzat Chimaev enfrentó a Gilbert Burns. Con una gran demostración de espíritu deportivo y habilidades, los luchadores se midieron en una guerra sangrienta hasta el final. Tras vencer a su rival, Chimaev reveló un episodio que le sucedió en la previa del evento.
«En realidad, fue un poco difícil luchar contra él porque vi a sus hijos, vinieron a mí y me dijeron ‘luchas contra mi papá’. Le dije m… no necesito eso«, empezó expresando el competidor en la conferencia de prensa posterior al enfrentamiento. En sus siguientes palabras, «Borz» continuó relatando los hechos que lo pusieron en una situación complicada.
«No quiero pelear con papá. Necesito ser un asesino como yo, que mate a alguien y no se preocupe por esa m… Fui hacia él y le dije que ‘te respeto hermano, lo siento por los puñetazos’. Lo hacemos por nuestra familia y para divertirnos también», aseguró el peleador en diálogo con los periodistas presentes en el evento.
Luego, el artista marcial checo comentó que «piensan que no respeto a los chicos, este es el juego. Intenté jugar con su mente y dejar que cometiera algunos errores. Me encanta esa m… He estado viendo todo el tiempo todos los malditos eventos de UFC. Intento aprender algo de todos y respeto a todos mis oponentes. Todo el mundo hace esto por su familia», explicó en la rueda de prensa.
Sobre el final, Chimaev se expresó acerca del complemento sangriento del enfrentamiento. «Me gusta esa m… Me encanta mi cara ensangrentada y sudorosa y patear a alguien, golpear a alguien, ganar dinero», soltó. Luego concluyó que «antes, no entendía este tipo de peleas. Fue mi primera pelea así. Me encantó. Estuve esperando eso durante mucho tiempo. Tuve 10 peleas y 10 finales, pero esta pelea ocurrió. Desangré, sudé y peleé tres rondas».
