Ha sabido conquistar a miles y miles de argentinos tanto con su música, como así también con su participación en “El Marginal”, el éxito que protagoniza Nicolás Furtado. Fue en “Podemos Hablar”, el ciclo que se emite a través de la pantalla de Telefe bajo la conducción de Andy Kusnetzoff, donde La Joaqui contó parte de su historia de vida.
“Mi mamá es más como mi hermana que mi mamá, nos criamos así. Ella trabaja en un bar y ahorró todo el verano para irnos a vivir a Costa Rica. Con mi papá tuve una relación rara porque no nos conocíamos en realidad. Estaba muy enojada por esto porque yo no entendía por qué no se podía”, comenzó manifestando delante de todos los invitados.
“A mi mamá la tuve que ver súper mal porque no teníamos para comer y crecí enojada. Estaba bastante mal y no supe manejar tanta libertad. Estaba descarrilada, tenía un montón de problemas de drogas y me movía en lugares peligrosos para mí. Cuando mi mamá me encontró, pensó que lo mejor era mandarme a Buenos Aires”, lanzó La Joaqui.
Además, comentó cómo fue que logró hacer un gran cambio. “Ser mamá fue lo que me cambió. Ni hacer charlas ni ir a terapias. Ser madre a los 20 años fue lo que lo hizo. Traté de hacer todo que me hubiera gustado que hicieran conmigo y no se pudo. Fui a psicólogos, a psiquiatras, me dieron medicamentos que me hicieron peor”, aclaró.
“Consumía cosas que me bloquearan para no pensar”, sostuvo y habló de la relación con su padre. “Me empecé a llevar mejor con él. Siempre lo súper amé…Me hubiera gustado tener una familia armada, ensamblada y es lo que busqué crear para mí”, manifestó La Joaqui, quien en un momento dado rompió en llanto al recordar a su abuela. “El tiempo no me alcanzó para que ella vea todo lo que está pasando. Por eso es la imagen con la quiero quedarme para siempre”, finalizó.
