UFC Vegas 44 prometía y cumplió por demás; en la estelar, la guerra entre José Aldo y Rob Font terminó con ambos heridos -tras una gran actuación del brasilero-, pero el punto culminante del espectáculo llegó cuando Rafael Fiziev conectó el nocaut de la noche en la cabeza de Brad Riddell en la pelea coestelar del evento de la franquicia.
Dejando de lado el duelo estelar, la pelea que estaba pactada para desarrollarse previamente ya se encontraba en la mira de los fanáticos de las Artes Marciales Mixtas (MMA) desde antes de que empiece el evento. Dos grandes amigos del deporte a punto de medir sus capacidades dentro del octágono: el número 12, Ridell enfrentando al dueño del puesto catorce, Fiziev, lo que cambiará luego de la velada de ayer.
Y las expectativas no desilusionaron cuando la realidad hizo su aparición inminente, ya que el compromiso estuvo a la altura de lo que debe ser una pelea coestelar de UFC. Ya en el primer asalto, las buenas combinaciones de los peleadores empezaron a mostrarse, Fiziev con un poco más de actividad, pero ambos se mantuvieron firmes, pese a los buenos golpes de izquierda del kazajo.
En el segundo round la tensión aumentó y los intercambios de golpes empezaron a afectar los rostros de ambos luchadores, que fueron precisos en sus combinaciones, así como sufrieron, cada uno por su lado, los buenos puños y patadas de su rival. Al sonar la campana, los peleadores se tomaron un descanso y regresaron luego para lo que sería el punto de inflexión del encuentro.
En el tercer round y con una gran intensidad tanto de Riddell como de Fiziev, el enfrentamiento no tenía dueño aún, debido a la gran actuación de los dos peleadores, pero entonces el oriundo de Korday conectó una impactante y magnífica patada giratoria a la cabeza del neozelandés, que cayó contra las paredes de la jaula, intentó un derribo pero no pudo concretarlo y se desplomó en el suelo. Así, el luchador kazajo llegó a su quinta victoria consecutiva y, con su récord de once victorias y una sola derrota (4-1 en UFC), empieza a acechar a los peleadores importantes de la división.