El gobernador de la Provincia de Salta, Gustavo Sáenz, y su ministro de Economía, Roberto Dib Ashur, mantuvieron este lunes un sorpresivo y misterioso encuentro virtual. En primer lugar llama la atención porque habría sido una reunión para conseguir “bonos verdes”, los cuales se obtendrían por medidas “ambientales” o “sustentables”, algo que se contradice con la deforestación que se habilita actualmente en los bosques nativos de Salta. Por otra parte, la actividad oficial genera incertidumbre ya que se dio con “el sector privado”, sin mencionar empresas, organismos o funcionarios.
En este marco, desde Grand Bourg publicaron un comunicado de prensa con el título: “El gobernador avanza en gestiones para la llegada de bonos verdes a la provincia”. El impulsor de la reunión virtual, con un hombre de anteojos que se infiltró en un video institucional, sería el ministro Roberto Dib Ashur, quien luego se manifestó desde las redes sociales al respecto de este financiamiento “verde”. “Estos bonos se generan a medida que las provincias aportan al desarrollo sostenible del planeta”, explicó sin dar más detalles.
El sector privado y secreto
Luego, desde la Gobernación solo comunicaron un breve texto donde mencionaron que el gobernador Gustavo Sáenz: “Evaluó a través de videoconferencia con el sector privado, el capital que puede generar la provincia de Salta por el aporte de la naturaleza, para la llegada de bonos verdes o de carbono”. Con la utilización del ambiguo e inabarcable “sector privado” la información oficial esquivó nombrar al hombre que dialogó con el mandatario y el titular de la cartera de Economía y Servicios Públicos.
“Salta tiene la posibilidad de generar créditos y recursos para fomentar el desarrollo y el crecimiento desde otra perspectiva y trabajar en favorecer acciones que creen conciencia ambiental”, indicó, más tarde, el funcionario Dib Ahur desde su cuenta de Twitter. La misma frase exacta es la que utilizó el mandatario en la misma red social sin revelar el o los representantes del “sector privado”.
Cabe mencionar que también estuvo presente en la misteriosa videollamada la directora de Rentas de la Provincia, Mercedes Uldry, quien salió en la foto oficial. Se trata de una comunicación extraña para la administración de Gustavo Sáenz porque lo habitual era que cuando dialoga con empresarios o dirigentes del “sector privado”, lo mencionan a todos y cada uno de los presentes del encuentro por nombre, apellido, cargo y la institución que representa.
El detalle de los bonos verdes y el conflicto interno
Por otra parte, según explica la Comisión Nacional de Valores (CNV), estos “bonos verdes” son: “Cualquier tipo de bono en el que los fondos se aplicarán exclusivamente para financiar o re-financiar, en parte o en su totalidad, Proyectos Verdes elegibles, ya sean nuevos y/o existentes”. La obtención de este tipo de financiamiento, de acuerdo con la CNV, está enteramente ligado a la realización de proyectos de: Energías renovables, prevención y el control de la contaminación, gestión sostenible de los recursos naturales y el uso de la tierra, transporte limpio y gestión sostenible del agua y de las aguas residuales, entre otros.
A contramano de estas metas que buscan paliar el cambio climático se encuentra la administración de Gustavo Sáenz, quien es uno de los principales responsables de los desmontes de Salta. Como bien informó El Intra, las denuncias de Greenpeace se multiplicaron ante la cantidad de hectáreas de Bosques Nativos que perdió el territorio salteño de manera ilegal.
Además, desde la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable aseguraron que habrá un “modelo de producción respetuoso” con los árboles ancestrales. Mientras tanto, la ONG internacional denunció hace pocas semanas que: “En poco más de un mes, el gobierno de Salta convocó a audiencias públicas para habilitar desmontes en siete fincas por un total de 28.311 hectáreas, una superficie equivalente a una vez y media Ciudad de Buenos Aires”. Según el monitoreo de deforestación que realizaron con la comparación de imágenes satelitales, durante el año pasado se desmontaron en la provincia 20.962 hectáreas, y entre ellas se cuentan 8.769 de bosques nativos.
Una hipótesis posible sobre el misterioso encuentro sería que el hombre del “sector privado” bajó el pulgar ante esta contradicción del mandatario y su ministro que intentan conseguir fondos sustentables sin tener medidas como las mencionadas anteriormente. El fracaso lo demuestra que no hayan revelado la identidad del empresario o dirigente secreto y en lugar de “avanzar” como asegura la prensa del gobierno, el mandatario estaría retrocediendo.